martes, 1 de enero de 2013

Rojo

Este artículo nada tiene que ver (ojalá fuera así y pudiera hacer un símil de la película) con la tercera parte (1994) de la trilogía del director polaco de cine, Kieslowski y que trata la fraternidad (parte roja de la bandera francesa). Este artículo no va de cine (que ojalá) como otros artículos propios, y no tiene ninguna connotación política de ningún tipo. Los colores están antes en la faz de la tierra que cualquier ser humano.

ROJO era el “nombre de guerra” (a estas alturas todavía la FBM lo llama así, que se le va a hacer…el siglo XXI llegara algún día…) de un amigo, compañero de generación (1973), ex compañero de fatigas de jugador y del mundo del arbitraje, que ha fallecido el pasado 17 de agosto del corriente año a los 36 años que nos corresponden (me cuesta mucho decir correspondían), a ambos.

Me encontraba en Blackpool ( Noroeste de Inglaterra) pasando unos días de vacaciones con mi amigo Aitor Estrada ( ex jugador once años antes en un sub´21 de Menesiano ¡HOLA!), y que juega en el Manchester Magic de la primera división inglesa (EBL), cuando David  ya nos había dejado y no me había enterado porque nadie había dado ninguna información(ser anónimo tiene estas cosas) , y al volver a mi casa, antes de ayer, me encuentro con el mazazo “en forma de correo electrónico” enviado por la A.M.A.A.B. (Asociación Madrileña de Árbitros y Auxiliares de Baloncesto), anunciándome que hace una semana (la información es del día 24), mi amigo David Perdiguero , alias “ROJO” en este “mundillo”, había fallecido de un paro cardíaco en el trabajo fulminante a mi misma edad. Todavía estoy sobrecogido y no me lo creo. ¿Qué está pasando en nuestros jóvenes corazones? “Puerta, Jarque…”

David Perdiguero es de esas personas que pasan por la vida, dan un gran servicio a todos sin pedir nada a cambio, una persona grande en todos los sentidos: de altura (creo que llegaba a 2 metros) y de un corazón más grande todavía pues era de esos árbitros autonómicos (“automáticos” nos llaman con cariño-esto sin ironía), de una categoría que somos más de 100 árbitros de “infantería”(bomberos nos llamaría Tello fijo, espero que Martín se acuerde de cuando utilizaba esta expresión en el AS), salvamos los muebles todas las temporadas pitando solos cada fin de semana-pero SOLOS  -sin compañero en el 80% de las ocasiones), que nos dedicábamos(yo todavía lo podre hacer) a “sacar la competición” para  la federación madrileña pagándonos nosotros de nuestro mísero bolsillo( somos los que peor cobramos, que no creo que los que peor pitamos): zapatillas, camiseta, beisbolera, pantalones, medias, silbatos, etc (TODO). Impresionante e indignante.


David era uno de los “míos” en todos los sentidos pues habíamos compartido pruebas cuando hacíamos las pruebas en el Virgen de Atocha Junior como jugadores (yo me quede, él no), y posteriormente, muchos años después, nos veíamos en el paseo del Molino (sede social destruida y casi desaparecida por desgracia), todos los jueves para recoger nuestras designaciones algo “quejosos” y algo “llorosos” por el trato que nos daban al pertenecer al grupo más bajo de la categoría arbitral.

David, recuerdo el último partido que pitamos juntos a la perfección cerca de nuestras casas. Fue un partido en el colegio Montserrat entre equipos femeninos senior de jugadoras “ex elite” , que nos machacaron a protestas ellas y los entrenadores cuando ganaban de paliza, y tuviste que poner orden como árbitro principal con toda la valentía y el saber estar y educación que demostrabas. El partido pudo terminarse, porque tu control de partido era total y  eras un árbitro de altos vuelos y se notaba que sabías de esto muchísimo. Aquel partido estaba muy por debajo de tu nivel en todos los sentidos.

David trataba al baloncesto con AMOR y eso está por encima del bien y del mal (esto es de Nietzsche), y ahora te vas y nos dejas con uno menos en nuestra “infantería arbitral”. Perder a un árbitro “automático” es una perdida grandísima pues SALVABAS partidos que corresponden en muchas ocasiones a DOS árbitros y te lo pagan al 150%, que no al 200%...

Seguiremos luchando un año más (luego nos darán una patada en el culo a todos los que hacemos algo más que arbitrar, ya que es un “sacrilegio” hacer ambas cosas), pero la temporada que viene arbitrare toda la temporada con mi silbato FOX 40 ROJO en tu memoria David (no me gustan los lazos, esos ya no se tienen si tú te has ido para siempre porque contigo tenía un lazo de amistad y no de muerte).

Descansa en paz. Allí arriba, algún día, pitaremos un partido acorde a tu NIVEL COMO PERSONA.

HASTA SIEMPRE y PITA “tres largos” (espero que muy largos), que yo llegare a pitar “uno” junto a ti… en PAZ, que aquí hay mucha GUERRA que no te correspondía, tal vez. Hasta siempre ¡¡¡AMIGO!!!

P.D.: Mi más sincero pésame a la familia de David y gracias a la Asociación por sus palabras de cariño en el correo electrónico que envío a todos nosotros hacia esta gran persona que nos deja con mucho dolor.

1 comentario:

  1. Artículo publicado en Basketconfidencial.com el 27 de agosto de 2009.

    ResponderEliminar